Opinión

Unidad: La palabra mágica en Morena

Por Malthus Gamba.

Este domingo se dio un evento significativo en la capital del estado de México. Toluca fue sede de un acto partidista importante, organizado por Morena.
La plana mayor de esta fuerza política se dio cita en ese espacio, para dejar constancia de un hecho que deberá tenerse presente, desde este momento y hasta el día en que resulte electo el candidato que representará al partido, en la contienda electoral del 2024, de donde saldrá el nuevo presidente de la república.
El mensaje es éste.

La Cuarta Transformación va en UNIDAD rumbo a ese compromiso electoral, sin dejar de entender que hay una batalla previa muy importante, que se verificará el año próximo, al elegir al nuevo gobernador del estado de México.

Epigmenio Ibarra califica a esa elección, como “la madre de todas las batallas”. Ganando la gubernatura en ese Estado, se abre en automático la puerta al triunfo en la elección federal del año siguiente.

El estado de México es el baluarte más poderoso de la clase política priista. Sin él, pierden su columna vertebral, pues esa entidad concentra el mayor número de votantes en el país. En las elecciones del 2017, mantuvieron el gobierno del estado, gracias a un fraude monumental que, para variar, las autoridades electorales no vieron.
En el evento que señalamos, vimos a la dirigencia de Morena, acompañada de todos los presidenciables importantes.

Debemos señalar que vemos a unos incansables Mario Delgado y Citlalli Hernández, organizar campañas y eventos importantes para el partido, obteniendo resultados significativos, a la hora de hacer el balance. A algunos no les gustará la forma en que trabaja la dirigencia. Sobre todo a las corrientes que han resultado derrotadas al interior de Morena. Pero los números están ahí. A la vista de todos. Es una dirigencia ganadora. Con ellos, la aplanadora de Morena marcha bien aceitada.

Este acto en Toluca, tiene una finalidad especial. Mostrar que una contienda interna, por la candidatura del partido rumbo a la presidencia de la república, no es de manera alguna, un enfrentamiento similar al que se da cuando se encara a los políticos de los partidos opositores. No se está luchando contra un enemigo. No hay ataques directos a los compañeros de partido y mucho menos el deseo de destruir al contrincante.

Los discursos de Marcelo Ebrard, Claudia Sheinbaum y Adán Augusto López, apuntaron hacia ese principio básico.

Vamos unidos y el partido respaldará en conjunto, al candidato de Morena, sea quien sea éste.

Ir juntos, tiene un motivo importante. La Cuarta Transformación es un movimiento social que pertenece a todo el pueblo de México. Es el movimiento que creó e impulsó el presidente López Obrador y quienes hoy compiten por dar continuidad al cambio, reconocen que no es concebible dividir al movimiento, por intereses personales.

Fue elocuente el discurso de Claudia Sheinbaum, señalando que todos estamos involucrados en la transformación del país. Hablar de la fortaleza del partido y de la necesidad de mantener el espíritu de unión que impulsa el presidente.

Marcelo Ebrard por su parte, hizo notar que todos sus compañeros de partido (señalando a quienes estaban presentes), habían luchado incansablemente en favor de la democracia y el cambio. Y que con toda seguridad lo seguirían haciendo en el futuro.

Adán Augusto López habló sobre el tamaño histórico del presidente López Obrador y de que no era posible traicionar o atentar contra un movimiento que había costado trabajo, voluntad y lucha permanente, por parte del primer mandatario y del pueblo mexicano.

Fue un acto de UNIDAD, donde se dejó en claro que una cosa es un ENFRENTAMIENTO con los oponentes conservadores y otra muy distinta la COMPETENCIA leal, entre militantes del partido formado por el presidente López Obrador.

Para los políticos de Morena, la situación está del todo clara. Se trata de una competencia abierta. Pero no de un enfrentamiento.

Habrá Unidad ante todo y el ganador, recibirá el respaldo de los demás contendientes.

Ese mensaje debe permear ampliamente en todos los sectores sociales que respaldan a la Cuarta Transformación.

Se vale tener preferencias. Se vale apoyar decididamente al precandidato que nos guste. Se vale hacer campaña a su favor.

Pero lo que considero no se vale, es atacar, o intentar manchar al resto de los competidores, con la finalidad de que nuestro “gallo” gane.

Esa actitud no está en la mentalidad de los mismos precandidatos. No es opción, ni la vía para alcanzar la meta.

En redes sociales, hay una inclinación por parte de algunos usuarios, para atacar con igual fuerza, a políticos opositores y a precandidatos que compiten en Morena.
Es decir, no pueden apreciar la diferencia entre enfrentamiento y competencia sana.

Así como se enfrenta a Claudio X González y su gente, se descalifica sin elementos válidos, a los precandidatos de Morena que no son de la preferencia de nuestro agrado. Como si fueran oponentes.

La reunión de ayer en Toluca tuvo esa finalidad. Dejar establecido claramente ante amigos y enemigos, que la Cuarta Transformación es un bloque sólido. No se va a fracturar con motivo de la selección de candidato a la presidencia. No va a haber ruptura, si es lo que esperaban.

Es por eso que los ciudadanos afinen al proyecto de Cuarta Transformación, debemos entender con claridad que en este momento, el país vive una etapa de cambio, donde muchas actitudes del pasado, dejan de aplicar.

Vimos dentro del PRI y del PAN, como los enfrentamientos para elegir candidato, se daban de la manera más sucia. A Roberto Madrazo, atacando miserablemente a Arturo Montiel, para llegar a la meta con actitudes viles.

A Calderonistas y Anayistas, lanzarse suciedad unos a otros.

Eso no puede repetirse en Morena. No se puede atacar a Marcelo, para que suba Claudia, o viceversa. No se puede lanzar suciedad, para conseguir respaldo hacia nuestro favorito.
Vivimos tiempos de cambio y todo esto debe ser entendido y aplicado, porque es parte de la Transformación. Un cambio sano.
Competencia sí. Enfrentamiento, no.

Salvo Ricardo Monreal, que ha demostrado ser un elemento poco confiable y con una actitud de engaño permanente, los demás competidores rumbo al 2024, son cartas de validez comprobada, cercanos al presidente López Obrador y con un bono especial a su favor:

“Todos son mis amigos”, dijo el presidente esta mañana en su conferencia.
Unidad es la palabra mágica, de aquí y hasta el 2024.

Reflexionemos.

Editor

Medio independiente de noticias relacionadas con la Cuarta Transformación de México.

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba