Política

Los Miserables: Por Álvaro Delgado

“Otra vez han sido los más prominentes medios de comunicación de México y sus conductores los que, anteponiendo los prejuicios a la información, mantienen una campaña de manipulación y mentiras que tiene una lógica política y electoral”.

Ante cada tragedia, unos y otros se superan: Los solidarios, la gran mayoría, apoyan, comparten, animan, reconfortan; los miserables, la minoría estridente y ruin, sabotean, manipulan, roban y mienten.

Así ha sido siempre en México ante todas los infortunios naturales y políticos: Una mayoría generosa se impone a la minoría vil que saca provecho de terremotos, inundaciones, sequías, los gobiernos mismos.

En la pandemia del Covid-19, los miserables desplegaron toda su infamia, aclamando a la muerte, pero ante la devastación del huracán “Otis” se superaron con una campaña aún más cruel e inhumana: “No dones”.

Con su vileza y sus prejuicios como la única prueba, afirmaron que la ayuda ciudadana que fluía era confiscada por las autoridades federales —el Ejército que este sexenio se volvió malo— y no había que proscribir la solidaridad.

Hubo hasta quienes celebraron el trámite de una demanda de amparo y que un juez otorgó la suspensión para que ninguna autoridad obstaculice la entrega de ayuda, una acción jurídica con base en sólo rumores y mentiras sobre el robo de donativos.

A la cantaleta sobre el Fonden, invocado como antídoto mágico par evitar los desastres, se ha impuesto ya, sin base alguna, hasta una cifra de muertes: No menos de 3 mil.

Otra vez han sido los más prominentes medios de comunicación de México y sus conductores los que, anteponiendo los prejuicios a la información, mantienen una campaña de manipulación y mentiras que tiene una lógica política y electoral.

Toda autoridad está sujeta al escrutinio, sobre todo si sus omisiones y acciones repercuten en el patrimonio y la integridad de las personas, y este es un examen que enfrenta el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, pero la crítica debe estar sustentada en información, no en las mentiras, prejuicios e insultos que ante la destrucción de “Otis” han proliferado.

La responsabilidad social de informar y criticar al poder público riñe con la difusión de “fake news” o información falsa, definida así por la Red de Periodismo Ético (EJN): “Toda aquella información fabricada y publicada deliberadamente para engañar e inducir a terceros a creer falsedades o poner en duda hechos verificables”.

Al frente de ese plan para capitalizar la tragedia están, otra vez, los mismos: Vicente Fox, Felipe Calderón, Claudio X. González, PRI, PAN y los oligarcas que no dan la cara ni su nombre, pero que estimulan la batida contra el poder público con todo el poder económico y mediático.

Ante la biografía de manipulación y mentiras de Televisa, TV Azteca está actuando todavía peor con Ricardo Salinas Pliego, su dueño, como el ariete de una campaña histérica y mentirosa, a una escala mayor de la que hizo en contra de Cuauhtémoc Cárdenas en 1998.

Salinas Pliego no quiere pagar lo que debe, que no es poco, sino más de 30 mil millones de pesos, y va a en profundizar campaña, en conjunto con los oligarcas mediáticos de radio, prensa y digitales, como “Latinus” del clan de Roberto Madrazo.

Ha sido otra vez el magnate Claudio X. González, jefe de la oposición y gerente de los grandes capitales de México, el que confiesa cómo debe capitalizarse electoralmente la tragedia:

“Otis, trágicamente destructivo. Morena, tantito peor. Para evitar que a todo el país le suceda lo que a Acapulco, hay que echar a Morena en ‘24. Nuestra democracia, nuestras libertades, nuestras leyes y nuestras instituciones están siendo destruidas. La tarea: Reconstruir en unidad”.

Este ruin mensaje del hijo de quien ha representado a la oligarquía del país desde los ochenta, Claudio X. González Laporte, es del domingo 29 de octubre, cinco días después del arribo de “Otis” a Acapulco.

Y en eso siguen: Las reuniones que tienen los dirigentes de los partidos es fabricar noticias falsas y explotar la veta política que creen haber encontrado en la devastación de “Otis”: Todo en México es destrucción gracias a López Obrador y a Morena.

El PAN ya envió a Washington a la senadora Kenia López para implorar la intervención de la Organización de Estados Americanos (OEA) y está en curso un despliegue propagandístico en todos los ámbitos.

Ya se verá si esta estrategia les es funcional al PRIAN, pero tampoco sus patrones han sido hábiles para explotar otras tragedias previas, incluido el pillaje de los recursos para los damnificados del terremoto de 2017, que tramaron ellos mismos.

Ya se verá también si los miserables, esa minoría carroñera de siempre, logra convencer a la mayoría solidaria que pondrá de pie a Acapulco, en cuya reconstrucción no debe haber ninguna duda: Primero lo pobres…

Editor

Medio independiente de noticias relacionadas con la Cuarta Transformación de México.

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